"Novedad. Cosa nueva y no acostumbrada. Suele ser peligrosa por traer consigo mudança de uso antiguo" (SEBASTIÁN DE COVARRUBIAS) 1539-1613

"No se desea lo que no se conoce" (NASÓN, PUBLIO OVIDIO) 43 AC-17 DC

martes, octubre 07, 2008

Los buscadores de robellones utilizan las últimas tecnologías

Google, los foros y portales de internet o el GPS son las maneras más modernas para encontrar estas setas.
Los buscadores de setas están recurriendo a todo tipo de técnicas para encontrar el preciado robellón. Hay quien piensa que escribiendo rovelló en el google aparecerá un punto mágico en el mapa donde se podrán cortar kilos y kilos sin mover la cesta. Los hay todavía más osados y aplicando los más avanzados criterios de documentación informativa escriben en el Google "rovelló + vilafranca" como si la localidad de Els Ports fuese la meca castellonense de la seta. Pero, al escribir en el buscador "rovelló + vilafranca" los resultados dirigen al ávido internauta hacia El Cadafal, el blog de Daniel Monfort, blogger villafranquino que ha escrito algún que otro artículo sobre la invasión de los pinares por parte de los robelloneros. En las últimas semanas el blogger ha registrado un notable incremento de entradas, procedentes de búsquedas que preguntaban a la red por la seta en cuestión.
Pero el deseo de los buscadores de setas no sólo se aprecia en esta web. En el foro de la web www.portell.tk hay quien pregunta por ubicaciones concretas de puntos exactos donde aparece la seta en masa. La "robellonera" es uno de los secretos mejor guardados del experto buscador que nunca, bajo ningún concepto, dirá dónde ha encontrado lo que lleva en la cesta. El administrador del fórum ofrece como respuesta unas coordenadas de GPS que, o bien conducen al pinar o al fondo del océano Atlántico, quién sabe.
Ya hace unos años que los buscadores más avispados memorizan en su GPS las coordenadas de las zonas donde hay más setas, pero la búsqueda en el Google es la novedad. En otoño el robellón llega a precios más que interesantes. En el interior puede adquirirse a 6 euros el kilo mientras que en Almassora los 6 euros se han pagado por una cuarta parte. Con 80 kilómetros de diferencia la seta multiplica su valor. Alguien saca tajo introduciéndose en una propiedad privada con una cesta, un pozal o una bolsa de plástico. Por suerte, la pantalla, todavía no da setas.
J. Domingo, Vilafranca
Vía: El Mercantil Levantino, 06/10/08

No hay comentarios: