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domingo, agosto 25, 2013

El medio ambiente en la crisis de finales de la Edad de Bronce

Foto: Mapa de Chipre con una visión general del Lago salado de Larnaca (Hala Sultan Tekke) en la bahía de Larnaca.

La desaparición de civilizaciones en el este del Mediterráneo hace 3.200 años habría sido el producto de una larga sequía, según investigadores franceses que subrayan la incidencia clave que tuvo el clima en las sociedades humanas.

Artículo de referencia: "Environmental Roots of the Late Bronze Age Crisis". Aquí.

El derrumbe político y económico de algunas civilizaciones avanzadas, como la micénica, minoica, o del vasto imperio hitita al final de edad de bronce, había sido sobre todo hasta ahora atribuido a destrucciones humanas en parte debido a las invasiones en el Delta del Nilo, las costas turcas o en Siria y en Palestina.


Los autores del trabajo, publicado en la revista estadounidense PLOS ONE, analizaron el polen encontrado en los sedimentos del lago salado de Larnaca en la isla de Chipre (en la foto).
El cambio de los isotopos de carbono, la "estructura química" de las plantas locales y de la región muestra que el lago tuvo una época húmeda antes de secarse paulatinamente. Este período corresponde a una sequía de cuatro siglos que originó la aniquilación de las civilizaciones.

Al combinar estos datos con índices arqueológicos como tabletas cuneiformes y la correspondencia epistolar entre monarcas, los investigadores concluyeron que la crisis del fin de la edad del bronce en el Mediterráneo oriental fue "un episodio complejo que se produjo por una sequía provocada por un cambio climático. Éste desató hambrunas, invasiones extranjeras y conflictos políticos".
Según estos investigadores, como David Laniewski de la universidad Paul Sabatier de Tolosa, el principal autor, el derrumbe de estas civilizaciones mediterráneas evidencia la vulnerabilidad climática de las sociedades que dependen de la agricultura.

Revolución francesa y civilización Maya
"Es uno de los mejores ejemplos que demuestran cómo una entidad económica y comercial internacional, compuesta de varios Estados, puede derrumbarse debido al cambio climático", estima Lee Drake, profesor de Arqueología en la universidad de Nuevo México en el suroeste de Estados Unidos. "Esto nos da una idea de la manera en que se produce", agregó el arqueólogo, que no participó del estudio.

El fin de la civilización Maya también se atribuye a una larga sequía (Ver artículo). Los historiadores estiman asimismo que un acontecimiento climático podría haber sido uno de los detonantes de la Revolución Francesa en 1789.

Pero en el caso de la sequía en el este de la cuenca del Mediterráneo a fines de la edad de bronce, las causas no están del todo definidas.

Las temperaturas de la superficie del Mediterráneo se enfriaron rápidamente durante esta época reduciendo la evaporación y las precipitaciones tierra adentro, según Lee Drake.

Esto coincidió con un enfriamiento general de dos grados en el hemisferio norte, precisa.

"La gran pregunta es saber por qué un cambio importante de la temperatura global pudo provocar una reacción tan rápida en el Mediterráneo", apunta el investigador.

"Pienso que es muy importante entender este mecanismo porque no es descabellado pensar que semejante fenómeno se vuelva a producir", dijo a la AFP.

"El mayor peligro en Medio Oriente no está necesariamente en un Estado o un dictador sino más bien en el cambio climático", estimó.

Vía: Terraeantiqvae, 21/08/2013
F:http://terraeantiqvae.com/profiles/blogs/el-medio-ambiente-en-la-crisis-de-finales-de-la-edad-de-bronce#.UhoVvz8Qd1k

martes, agosto 13, 2013

Un equipo de científicos sienta las bases para crear la Lista Roja de Ecosistemas en peligro

Del mismo modo que existe una Lista Roja de Especies Amenazadas que gestiona la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y que contempla el riesgo de cada especie frente a la extinción, esta organización ha propuesto la creación de su equivalente para los ecosistemas.

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha participado en el desarrollo de una metodología para la creación de una Lista Roja que contemple el riesgo de extinción de los ecosistema, que ha sido publicada en la revista PLOS ONE. Su objetivo es evaluar el peligro que tienen estos ecosistemas de sufrir un colapso, lo que implicaría la pérdida de sus características abióticas y bióticas esenciales.

El investigador del Instituto Pirenaico de Ecología Francisco Comín, que ha participado en este trabajo, explica que la iniciativa es una respuesta a la larga discusión científica sobre conservar y proteger especies frente a conservar y proteger espacios.


"Este protocolo está pensado para ser aplicable en ecosistemas terrestres, subterráneos, acuáticos y de transición, así como para ambientes seminaturales y antropizados. Una comisión creada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza estudiará cada propuesta e integrará las ideas que considere oportunas", asegura Comín.

La metodología propone cinco criterios para evaluar el riesgo de colapso de cada ecosistema: la reducción en la distribución geográfica del ecosistema, la reducción de su tamaño o área de ocupación, la tasa de degradación ambiental abiótica, la tasa de perturbaciones sobre los procesos bióticos y la cuantificación del riesgo de colapso.

Colapso vs extinción
El análisis pormenorizado de cada uno de ellos da lugar a una clasificación global final dentro de las diferentes categorías de riesgo: no evaluado, datos insuficientes, de preocupación menor, cerca de la amenaza, vulnerable, en peligro, en peligro crítico y colapsado. La categoría de colapso equivale a la extinción para animales.

Según el artículo, “el desafío científico de desarrollar un marco unificado de riesgo para ecosistemas es mayor que en el caso de las especies”, ya que la Lista Roja está pensada para poder identificar el riesgo de los ecosistemas de perder su biodiversidad, sus funciones ecológicas y los servicios que el ecosistema produce. No obstante, el detrimento de algunas de estas características puede actuar en beneficio de algunas otras, por lo que “es complejo establecer las relaciones entre todas ellas”.

Para conseguirlo, Comín explica: “Primero construimos un marco de conceptos genéricos y modelos derivados de diferentes teorías ecológicas y, en segundo lugar, propusimos los requisitos o mínimos para trasladar estos conceptos en estimaciones prácticas”. Según el investigador del CSIC, “el equipo ha decidido resaltar los riesgos sobre la biodiversidad como objetivo principal de la Lista Roja de Ecosistemas, ya que es el componente vital para ellos”.

Asimismo, la metodología propuesta está acompañada de 20 casos de estudio donde ha sido aplicada. Los investigadores han utilizado este protocolo para evaluar, por tanto, 20 ecosistemas diferentes del mundo.

Vía: SINC, 12/08/2013
F:http://www.agenciasinc.es/Noticias/Un-equipo-de-cientificos-sienta-las-bases-para-crear-la-Lista-Roja-de-Ecosistemas-en-peligro