El Archipiélago cuenta con unas 2.000 semillas en el germobanco de la Macaronesia que preservarán las variedades regionales y de la Macaronesia, sin embargo, la reserva genética de Noruega, el conocido como 'arca de Noé', no cuenta con ninguna variedad autóctona.
EUROPA PRESS Así lo han señalado tanto desde la Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias como desde Cultesa del Cabildo de Tenerife en donde han señalado que es el Centro Nacional de Recursos Fitogenéticos quien hace la selección y que, en principio, se mandan semillas "ortodoxas y genéricas", que es el fin para el que se ha construido esta reserva en el Ártico.
Tanto los agricultores, como los representantes de las administraciones consideran que el "empeño" de Canarias debe centrarse en ampliar el número de semillas autóctonas en los germobancos de las Islas para mantenerlo como un recurso propio para que siga además en manos de los agricultores.
En este sentido, desde la Red Canaria de Semillas han comenzado a trabajar en una propuesta con la que los propios agricultores se conviertan en 'guardianes' de una variedad en desuso para garantizar su cultivo dentro de Canarias.
Esta agrupación de agricultores mantiene sus recelos sobre el 'arca de Noé' ya que consideran que si bien está la ONU detrás del proyecto parte de la financiación viene de manos de una asociación que preside Bill Gates y temen que se puedan apropiar de un valor patrimonial que ha sido siempre "propiedad de los agricultores".
Desde la empresa pública Cultivos y Tecnología Agraria de Tenerife (Cultesa), señalaron sobre este asunto que existen una serie de protocolos que prohíben "adueñarse" de las semillas que históricamente han trabajado los agricultores locales. Uno de sus técnicos precisó que "las variedades autóctonas están protegidas, pues son propiedad de quienes cultivan la tierra. Son los legítimos dueños de las semillas".
Aclararon, además, que sólo las nuevas variedades 'elaboradas' por empresas privadas pueden patentarse. También, explicaron que la protección de las variedades regionales está dentro de un protocolo firmado por los gobiernos con la ONU y que "nadie puede saltarse".
"Es evidente" --aseguraron desde Cultesa-- "que hay muchas más variedades y que con la falta de uso van desapareciendo, sobre todo porque la sociedad, en muchos casos, es incapaz de distinguir estas variedades".
Por su parte, desde la Red Canaria de Semillas abogan por redescubrir estas producciones diversificadas para su puesta a la venta con el fin de que los ciudadanos descubran "la riqueza" de la agricultura canaria.
Vía: La Provincia, 12/05/08
No hay comentarios:
Publicar un comentario